Seguro que alguna vez has oído hablar del ácido hialurónico. Esta sustancia está presente de forma natural en el cuerpo humano, pero disminuye su presencia con el paso del tiempo dando lugar a una piel menos hidratada y elástica, favoreciendo así la aparición de arrugas. El ácido hialurónico se descubre por primera vez en 1934 por dos farmacéuticos alemanes pero no es hasta los años 70 cuando se crea el primer producto de uso médico aumentando así su popularidad. Bien, vamos a profundizar un poco más en el ácido hialurónico: ¿Qué es y para qué se usa en odontología?
¿QUÉ ES EL ÁCIDO HILAURÓNICO?
El ácido hialurónico es un polisacárido que pertenece al grupo de los glicosaminoglicanos cuya función es la estructura de la piel, siendo su función la elasticidad de la misma. Una de las virtudes del ácido hialurónico es su capacidad para retener grandes cantidades de agua, lo que proporciona volumen a los tejidos. El ácido hialurónico ha alcanzado gran prestigio y fama dentro de la medicina estética por su duración y propiedades y su uso se ha extendido al mundo de la odontología. Además el ácido hialurónico participa en la regeneración celular y potencia la formación estructural de los cartílagos.
Dentro del mundo de la odontología se usan dos tipos de ácido hialurónico:
– Reticulado: Está formado por una serie de moléculas que crean entre sí una malla que aporta mayor durabilidad, densidad y estabilidad. Se presenta en forma de gel y su durabilidad oscila entre los 6 y 9 meses.
– No reticulado: Las moléculas del ácido hialurónico no reticulado no están unidas entre si por lo que, a diferencia del reticulado, no crean una malla. Esta se presenta en forma líquida y su estabilidad y durabilidad dura sobre los 3 meses.
USOS EN ODONTOLOGÍA
Como ya hemos mencionado anteriormente su uso se ha extendido mucho más allá de la medicina estética y el mundo de la odontología ha querido recoger el guante para poder aplicar su uso dentro de este campo.
1. Ácido hialurónico en la estética dental:
Gracias a las propiedades del ácido hialurónico anteriormente mencionadas podemos mejorar la elasticidad e hidratación de la piel, mejorando así la estética de nuestra sonrisa. Dentro de los beneficios en la estética dental destacamos su uso para las arrugas de código de barras, perfilado y volumen labial, zona peribucal, reducción de surcos nasogenianos o la reducción de la sonrisa gingival.
2. Ácido hialurónico en la patología de la articulación temporobandibular:
Se muestra altamente eficaz en personas que sufren esta patología, mejorando notablemente su calidad de vida. Reduce la inflamación y el dolor, mejora las funciones de las articulaciones y frena el avance la enfermedad.
3. Regeneración de encías y mucosa bucal:
Gracias a sus propiedades de regeneración celular es capaz de reconstruir y recuperar zonas de la encía que han sido dañadas.
4. Acelera la cicatrización:
El ácido hialurónico también es muy eficaz a la hora de cicatrizar heridas. Cuando nos sometemos a una cirugía bucal el ácido hialurónico nos ayuda a cicatrizar antes y a sufrir menos inflamación.
En nuestra clinica dental en Tenerife tenemos los mejores tratamientos dentales del momento. Ven a preguntar por nuestros tratamientos con ácido hialurónico. Nuestros profesionales expertos en estética dental te ofrecerán una atención personalizada para darte el mejor tratamiento posible. ¡Estamos en Adeje, calle de la cruz, Nº46, 1ºB!
Esperamos que nuestro artículo << Ácido hialurónico: ¿qué es y para que se usa en odontología?>> os haya servido de ayuda. Recordad que puedes seguir más artículos relacionados con el mundo de la odontología en nuestro blog.